domingo, diciembre 04, 2005

Plácido domingo

Seguimos con las peticiones del oyente. En esta ocasión, recupero para Mir parte de un texto publicado en su momento en Efectolupa.com (volveremos). Que lo sufran con salud:

[Los domingos por la tarde] El tema surgió en el blog de La Perri, que se cita dos veces en el número de esta semana, ya nos puede ir devolviendo el favor. La conclusión a la que llegamos es que tener pareja sólo sirve para rellenar las tardes de los domingos, al menos a los que no nos gusta el fútbol. Lo que me lleva a preguntarme para qué quieren pareja los futboleros. El caso es acaparar, ¿no? ¡Despilfarrando recursos no levantamos España!
Quiero que se entienda el dramatismo de la situación: es domingo. Por la tarde. No tienes novia. No te gusta el fútbol, es más: Pepe Domingo Castaño te pone nervi… ¡OTRO PURITO! ¿No es para poner nervioso a uno? Pues eso: ¿qué te queda? ¿Ver Rex, un policía diferente? ¿Cortarte las venas con un papel? Pero con lo plano, ¿eh?, que así es tan emocionante como la serie.
Con los amigos, mejor no contar. Hay varias modalidades:

  • “No, es que he quedado con la Puri”. Es comprensible, uno haría lo mismo. El hombre se ha echado novia para tener algo que hacer las tardes de domingo, no la va a desaprovechar. Sería como comprarse un home cinema para ver las películas de Pajares y Esteso.
  • “Es que voy a bajar a ver el partido al bar”. Es español, así que le comprendes.
  • “Es que voy a bajar a ver el partido al bar. Vente, hombre”. Lo hace con buena intención, pero jode. ¡Que no me gusta el fútbol, coño! Si me gustara no te llamaría en plan “notengonadaquehacerymeaburro”, que ya sé que hacen partidos todas las semanas.
  • “Es que he quedado con la Puri y luego me voy a ver el partido”. ¡¡Cabrón!!
  • “Es que ponen Rex”. El pobre. Alguien debió buscarle novia cuando aún no era irreversible. La ociosidad en las tardes de domingo hace estragos.

Las opciones también se te recortan mucho. Salir a la calle un domingo por la tarde cuando no tienes pareja es como para un diabético entrar en el Dunkin’ Donuts. Especialmente a estas alturas del año: ¡¡mecagüenlaprimavera!! Además, siempre hay excusas: “puff, qué calor, paso de salir” o “con este frío, mejor no salgo de aquí”. Si se cambia el concepto “salir” por “trabajar”, tendremos un retrato del funcionariado español. O de la mayor parte de los columnistas de Efectolupa.com.
Así que hay que quedarse en casa. En el Messenger no hay nadie, por los mismos motivos que no hay con quién quedar. Y si te encuentras a alguien, peor: “huy, éste. Metido en casa un domingo por la tarde. ¡Qué chungoooo!” A la tele mejor no acercarse: últimamente miras con cariño al pastor alemán del vecino. Probemos a encender la radio, a ve… ¡¡OTRO PURITO!! ¡Mierda! Siempre se me olvida. ¿Y un libro? ¿Cómo? ¿Y renunciar a todo el patriotismo español conseguido la noche del sábado a base de cerveza? ¡Jamás! Total, que meriendas. Dos o tres veces, las que hagan falta. “Igual engordo así, ¿eh? Bueno, ya el domingo que viene bajo a correr y así lo quemo y tengo algo que hacer”. Ya. Sí. Venga.
Amigos, el negocio del futuro está en organizar actividades para que los solteros tengan (tengamos) algo que hacer en las tardes de domingo. La clientela está asegurada, no pasa nada porque los juntemos: de ahí no saldrá ninguna pareja. ¿Quién va a querer liarse con alguien que tiene que apuntarse a algo para tener ocupados los domingos por la tarde? Si fuera normal ya tendría pareja o algo…¿Por qué no pondrán Los Simpson los domingos por la tarde?

9 comentarios:

mir dijo...

jajajajjaja, qué bueno, anómalo... jajjajajajaja

Bueno, yo los domingos por la tarde er... me siento totaaalmente identificaaaadaaaa... buaaaahhhhh!!! (<---- eso es llanto)

Y sí, para entretenernos ya nacieron meetic, match... pero es que los "ciberrollos, son un rollo", siempre encuentras a alguien "fantástico" a miles de kilómetros(o a quinientos, da lo mismo).

De ahí la aficción a flickr, al blog, y a todo lo que sea huir de Rex y de "Cine de Barrio".

Según las últimas estadísticas, somos 7 millones de jóvenes y jóvenas los que nos encontramos en esta "situación", así que no desesperes, y aunemos fuerzas, porque como se nos ocurra algo para entretener a toda esta peña, nos forramos, anómalo.

Anónimo dijo...

Me uno a la sensación desesperante de domingo-por-la-tarde-en-casa-dando-vueltas-como-animal-enjaulado... Pelín estresante, oiga, lo que me faltaba a mí.

Que sepas que tienes un enlace en Preludio. He dicho :P

Bezoz!

Anónimo dijo...

jo, anomalo.... cuanta, cuanta verdad junta... conozco a gente que no sabe quien es rex (y con eso creo que lo digo todo sobre esa gente)... solo os dire... asi aqui que nadie me oye que los domingos por la tarde suelo arrepentirme de muchas cosas y siento una especie de atracción incontrolable que hace desear horriblemente coger el teléfono y hacer llamadas que nunca me atreveria a hacer cualquier otro dia... aich

mir dijo...

perriiiiii, como yo. Aunque cometido ese error alguna vez, opté por borrar los números susceptibles de recibir llamadas que me hicieran sentir mal.

A la larga los recupero, porque "siempre vuelven a casa por Navidad". Pero al menos, aunque tenga la tentación, no puedo llevarlo a cabo.

Funciona!.

Anónimo dijo...

Gran post anómalo.
Sé perfectamente quién es Rex así que me lanzo a opinar.
Yo los domingos por la tarde me los apaño con la peli de antena3 basada en hechos reales de después de comer porque así me consuelo con que no soy una animadora acosada por su profesor de gimnasia, o una mujer de 40 que descubre que su marido se lo monta con su mejor amiga. Aunque acabo por concluir que fijo que ambos personajes tenían plan de domingo por la tarde...
Lo malo es que acaban a las 6. Entonces me echo a la calle, con quién sea, cómo sea, a lo que sea. Los domingos soy una chica fácil.

Anómalo dijo...

En verdad, en verdad os digo que en estas semanas de puente, los domingos se multiplican por doquier. Suerte que para el domingo verídico ya tengo plan: comerme un atasco brrutall de vuelta de Granada (sí, amigos: esta semana no me verán por Graná).
Mir: ¿¡siete millones!? Iba a preguntar que dónde se meten, pero es evidente: en sus casas, junto al ordenador. Creo que debemos crear un virus que infecte a los que se conecten los domingos por la tarde. Así nos encontraríamos todos frente a nuestros portales con cara de lelos.
Patri, le quedo reconocido.
Perri, a mí eso me pasa cuando llego por la noche los sábados (o equivalente). Soy más de sms.
Gab, no pienso apostillar esa última frase tuya XD
Cuatro mujeres quejándose en mi blog de que no tienen nada que hacer los domingos por la tarde... Me siento superado por los acontecimientos.

mir dijo...

mira, te podrías proponer entretenernos con algún post participativo los domingos por la tarde... ya puestos...

Anómalo dijo...

Mir, en cuanto a post participativos no me siento a tu altura. ¿Te llegó el poster?
Lo único que se me ocurre es un juego que hacíamos en la Facultad cuando no huíamos a tiempo a la cafetería: ¿conocéis el "oráculo de Bacon"? Consiste en coger dos nombres de actores y unirlos en el menor número de pasos posible.
Por ejemplo: Jesús Bonilla con Jack Nicholson.
Bonilla- Santiago Segura en El oro de Moscú.
Segura- Wesley Snipes en Blade II
Snipes- Stephen Dorff en Blade I
Dorff- Nicholson en Días de vino y rosas
Frikis somos, sí.

mir dijo...

¿a mi altura? Pero si soy muy bajita... y mis post son er... "son" y basta...