Crossover: Lorzagirl
Como soy de natural gandul, me he engañado a amiguetes y bloggeros varios para que me hagan parte del trabajo sucio. Perdonad mi sinceridad, amigos. Por ella me queréis tanto como me despreciais.
Inaugura la sección crossover Lorzagirl de Lorzagirl. Tú sí que eres ídola.
Todo empezó porque a Eme A le daba miedo ir solo a conocer a las chicas de Quédate a Dormir y me pidió que le acompañara porque claro, si vas a quedar con dos personas que pueden ser unas psicópatas, ¿quién mejor para defenderte que una chica que apenas supera el metro y medio de estatura, y a la que todo le da miedo?
Así que nos presentamos los dos... aunque, ejem, yo me perdí y llegué tarde y luego tenía tanto miedo (por fin, por fin voy a conocer a mis ídolas) que tuve que esperar en la puerta a que me dejaran de temblar las rodillas, así que cuando por fin entré en el restaurante ya casi habían acabado de cenar.
No sé como sobreviví a esa cena sin que me saliera una úlcera. Seguían temblándome las rodillas, el estómago se me encogió, y no paraba de hablar y de decir tonterías (bueno, como siempre).
Pero me lo pasé en grande.
Esta bonita historia que no viene a cuento para nada es la precuela de la historia en sí.
Porque después de aquello las chicas nos invitaron a una fiesta.
Y en la fiesta a la primera persona que nos presentaron fue a un chavalín que se hacía pasar por mayor de edad.
-Mira, Lorz -me dijeron-: este chico es Anómalo.
-Sí, ya veo -contesté-. ¿Y cómo se llama?
Creo que la temperatura ambiente descendió unos 50º en aquel momento.
-Anómalo. Me llamo Anómalo.
Jo. Que padres más crueles, pensé.
Entonces me di cuenta de que el interfecto me sonaba de algo. La sensación se acrecentó a lo largo de la noche. Yo había visto a este tipo en alguna parte. Seguro.
En una de esas fotos que ponen en las comisarías, probablemente.
Ni que decir tiene que mantuve mi bolso firmemente agarrado todo el tiempo.
Más tarde, y después de una ardua labor de investigación logré descubrir dónde le había visto antes.
Pero no lo voy a decir porque estoy a favor de la reinserción.