Un país demasiado javiermarías

El Anómalo comprueba con estupor que satura al hijo del filósofo

El plagio del estilo del Zagloso es debido a que él fue el que me pasó este link.
El ínclito y periclitado novelista inicia su columna del domingo pasado con un contundente titular: "Un país demasiado anómalo". ¿Demasiado? ¿En qué se basa? ¿En todo caso, no es España un país mucho más juangarcía que anómalo? ¿Por qué la toma conmigo?
La cosa sigue con un "en verdad este país es anómalo". Estupefacto ante tal hartazgo de mi persona (sin conocerme, que es donde está la nota discordante), le llamé:

Javier Marías: Residencia de Javier Marías, le habla el insigne autor.
Anómalo: Hola, Javiermarías. Oye, que antes de nada quería decirte que me encantó Dos mujeres en Praga.
Javier Marías: Ese no es mío, que yo soy Javier Marías.
Anómalo: Ya.
Javier Marías: ...
Anómalo: Pues nada, majo, que soy el Anómalo y que quería saber qué te pasa conmigo.
Javier Marías: ¿A mí? ¿A Javier Marías?
Anómalo: Er... sí.
Javier Marías: A Javier Marías no le pasa nada contigo, usaba el término en su forma adjetivada, no sustantivada.
Anómalo: Er... ¿a que las demás letras de la página son el resto del artículo?
Javier Marías: Toda la página es la columna del domingo de Javier Marías, sí.
Anómalo: ¿Y no me menciona a mí, sino que es un adjetivo?
Javier Marías: Así es: como intelectual, Javier Marías reflexiona sobre la AVT.
Anómalo: ¿La de Madrid-Sevilla o la de Madrid-Lleida?
Javier Marías: Mira, chico, será que paso mucho tiempo en mi despacho encerrado escribiendo mis impresionantes novelas, pero no te entiendo.
Anómalo: Nada, hombre, perdonado. Y disculpe la confusión. Es que estoy acostumbrado a leer El Mundo y en cuanto paso de la segunda línea ya me pierdo.
Javier Marías: No se puede ser tan egocéntrico, chaval.

A que ya no me firma el deuvedé de Alatriste.
Jo.