martes, diciembre 20, 2005

Omega-3

No como pez, ¿vale? La gente no entiende por qué. Posiblemente yo tampoco lo entienda. Salvo porque no me fio de unos bichos que viven en el sitio al que arrojamos toda la basura. Y que después de muertos hacen todo lo posible porque te claves sus cartílagos y de paso te mueras tú también. Tengo un trauma, lo sé, y ningún snorkel podrá remediarlo.
Tampoco como mariscos porque me parecen versiones poppies de un insecto cualquiera (¡no me engañáis con el rosa, so moluscos!).
La conclusión es que debo tener el omega-3 (alfa-2, un 1 en la Kiniela) por los suelos. Porque yo eso de que a la leche le añadan omegas... también me pone tenso. Me imagino a un montón de Panorámix echándo cochinaditas en el tanque de leche, allá en la Central Lechera Asturiana (iba a poner Letiniana o Alonsiana, pero me sonaba mal). Y hace tiempo que oí en la radio (tranquilos, no fue en la wikipedia) que la gente con el Omega-3 bajo tiende a ser impulsiva y pasional. De ser invisible no dice nada.

Así que éste es el briconsejo de hoy: parejas del mundo, desde aquí os lo digo: ¡en los restaurantes hay que pedir carne!

Notas: Si alguien encuentra el estudio exacto de lo del Omega-3, me lo haga saber y lo subimos al otro blog.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

mis peleas con el colesterol (al cual se combate con omega-3 y pescado azul) y mi falta de impulsividad (según el tema, claro) están relacionadas entonces? debo comer más carne para ser más lanzado con las mujeres?? por eso tú estás tan salido???

Anómalo dijo...

Ay, Eduardo... qué poco sabes de la vida.

Carmen Mañana dijo...

anomalo!!!!!!!!!!!!
Todo tiene sentido... derepente... soy carnívora y por eso soy así... puedo echarle la culpa a la falta de pescado en mi dieta (yo como, no soy como tú... me gusta mucho pero no tengo la oportunidad de comer mucho...)... lo oricios no son poppies... deberías empezar por ellos... graciasssssssssssss por la excusa

mir dijo...

me he acordado de tí, anómalo...

http://elastico.net/archives/006350.html

Anónimo dijo...

Y digo yo: ¿qué narices le importa la dieta a un hombre invisible?

Anómalo dijo...

Si la dieta es un régimen y un régimen una dictadura, la dieta es una dictadura que domina nuestras vidas. Luego existo...
Mir, supongo que es por el hecho de que te enlazan más a ti que a las webs de Pío Moa. No te envidio desde que veo desde cuantos países se conectan a mi blog XD
Necesito dormir y para eso los párpados invisibles son una lata.

mir dijo...

c*b*n... jajaajajajja, has estado gracioso con lo de Moa...

Anónimo dijo...

Yo como de todo, no tengo problema pero eso de que le echen guarrerias a los alimentos de siempre...como por ejemplo la leche, siempre imaginé que a la leche con calcio añadido les echaban trozos de hueso triturados...Pero, en fin, que le vamos a hacer, soy un gordo y no tengo remedio. Por eso ni soy impulsivo ni todo lo contrario, sólo soy un gordo (creo que me voy a aficcionar a esto de los blogs y voy a crearme uno propio, ya veremos...)

Carmen Mañana dijo...

anomalo, mir ... ya no os pasais por la perrera... ¿dónde estais encerrados y qué estais haciendo sin miiiiiiiiiiiiiiiii?

mir dijo...

voy pa'llá, perri!